PROYECTO DRAGONES surge en la comunidad de la parroquia Santa María de La Lucila (diócesis de San Isidro) como un llamado a apoyar y acompañar a los agentes pastorales y sociales que trabajan en la zona del Chaco Salteño; para que, uniendo fuerzas, podamos incidir en la erradicación de la pobreza extrema y sus consecuencias.

En 2021 nos propusimos anclar nuestra ayuda en la zona de Fortín Dragones, diócesis de Orán. Región de pueblos originarios a quienes los cambios culturales y productivos de las últimas décadas han corrido de sus tierras y de sus fuentes de alimento ancestral.

Son poblaciones invisibilizadas, olvidadas por las políticas públicas. Pueblos enteros que viven del asistencialismo esporádico y que manifiestan ya enormes problemas de salud y educación básica. La desnutrición severa se transformó en el mayor problema.

En Argentina, 6 de cada 10 niños pasan hambre, pero en esta región podemos asegurar que 9 de cada 10 niños están en esa situación.

Por eso, acogimos un lema que nos inspira: “Alimentando el futuro”, porque tenemos la certeza de que ese futuro solo será posible si se lo enfrenta desde varios ángulos, y que debe construirse hoy, sin retraso, con la colaboración de todos los que sentimos un compromiso con la gente y con nuestro país.

 

Población a la que asisitimos

Comunidad de 60 familias de la etnia wichi, con 150 niños. 80 de ellos son menores de 5 años. Sostenemos un comedor para que los niños más pequeños y las mujeres embarazadas puedan recibir al menos una comida nutritiva al día. El comedor tiene el seguimiento profesional de una nutricionista del hospital de Dragones, quien dio cuenta del impacto positivo que se midió en la salud de esta población a partir de la ayuda enviada durante estos dos años. Se realizan también tareas de apoyo escolar con niños entre 6 y 15 años.

 

Nos proponemos

  • Mantener el servicio de comedor para la primera infancia.
  • Ampliar el servicio de comedor para niños entre 6 y 15 años.
  • Sostener los honorarios de 2 personas que dan apoyo escolar.
  • Apoyar la huerta comunitaria que están desarrollando actualmente.
  • Hacer el cerramiento lateral del salón de usos múltiples que funciona como salón comedor.
  • Crear una ludoteca y rincón de estimulación temprana para niños entre 0 y 5 años.
  • Instalar una plaza de juegos en el predio del comedor.
  • Adquirir equipamiento para deportes: pelotas, arcos, camisetas, zapatillas.

 

Nuestra misión a futuro

Asumir el tema nutricional en este primer momento es vital. Pero entendemos que el desarrollo de la infancia y la adolescencia en Fortín Dragones implica sostener en el tiempo otros ejes importantes: cognitivo, psicológico y emocional.

Los adolescentes se encuentran aislados por la distancia a los colegios secundarios; desmotivados y faltos de proyectos de vida por la escasez de oportunidades reales y la inexistencia de propuestas alternativas: capacitaciones en oficios, deportes, expresiones artísticas, educación digital. Esto los pone en un riesgo cierto de caer en adicciones. Tomar alcohol y aspirar
nafta son moneda corriente en la población joven, incluso en niños de 12 años.  Esta grave situación nos interpela para que en un lapso de uno a dos años, podamos ocuparnos desde Proyecto Dragones en ofrecer espacios de aprendizaje y desarrollo cultural, deportivo y tecnológico para los jóvenes.

 

Para conocer más de nuestros proyectos te invitamos a que visites nuestro sitio web www.proyectodragones.org y nos sigas en instagram @proyecto.dragones